El sentir del vecindario es ¡Sí, Parque!

Necesitamos respirar naturaleza, necesitamos jugar al aire libre, necesitamos sombra.

Hemos salido hace unos días a la calle nuevamente, a tomar un poco el pulso a vecinos y vecinas de cara a lo que nos ofreció hace tres meses el Alcalde de la ciudad: 

Abrir un proceso de participación a través del distrito con los vecinos afectados para que se pronuncien sobre tres alternativas posibles:

• opción a) que sea una zona residencial como prevé el PGOU,
• opción b) que sea un espacio verde 100%, u
• opción c) encontrar una fórmula intermedia que compagine ambos usos.

Tras un tiempecito de dedicación para que se lleve a cabo una zona  verde para el ocio y esparcimiento vecinal, somos plenamente conscientes de que el barrio y la gente que vivimos por la zona centro-norte de Sevilla necesitamos un parque, lo que denominamos, nuestro Pulmón Verde.

Pero lo importante es que participemos y podamos entre todos aportar, proyectar, construir nuestro barrio para una vida saludable para la gente de todas las edades, especialmente para que las personas mayores paseen bajo la sombra de árboles, entre zonas de vegetación que les de bienestar, y la gente menuda pueda jugar en contacto con la naturaleza y sin causar molestias a viandantes.

Así que, nuevamente hemos salido a preguntaros, vecinos y vecinas, cuál es la alternativa que consideráis más adecuada y necesaria, de las tres que el Alcalde nos va a ofrecer para elegir.

Hemos encontrado a cuatro vecinos y vecinas de la calle Arrayán, dos vecinos de la calle Virgen Carmen Dolorosa, tres de la Alameda y una vecina de la calle Sorda, personas de edades diferentes, con profesiones y trabajos variados. Diez personas del barrio y todos ellos han coincidido, ¡adivinad cuál ha sido la opción más elegida!

Sí, la opción b, un espacio verde 100%. Nuestro parque, nuestro Pulmón Verde, ¡sí!

Álex opina lo mismo que sus hijos, que quieren un parque. Él es científico y plantea que, sin duda, “necesitamos más árboles y más espacios verdes para que nuestros niños jueguen y nuestros mayores paseen. Y menos cemento.”

 

 

Dani es músico y artista, opina que necesitamos un lugar donde poder socializar y en contacto con la naturaleza, por eso considera que necesitamos que este espacio sea una zona verde, porque “la Alameda no es un parque.”

 

Para Antonio, que es geógrafo, ésta es una zona con mucha población joven y con niños en la que “hay un déficit de zonas verdes y espacios libres en la zona norte del Casco Histórico, y los que hay, están ocupados por uso comercial y hostelero.”

Ana y Raquel, amigas y vecinas, son pedagoga y empresaria de moda, respectivamente. 

Ellas, además de querer un barrio más acogedor para sus hijos, con zonas ajardinadas para poder estar un poco en contacto con la naturaleza cerca de casa, añaden su preocupación “porque necesitamos más árboles y menos pisos para contribuir a paliar el cambio climático.”

 

 

Abel es investigador del CSIC. Él y su hijo, que es estudiante de Primaria, echan de menos tener cerca un lugar ajardinado de esparcimiento: “La zona necesita un punto de recreo y reunión para niños y adolescentes, cuanto más natural y menos urbano, mejor.”

  

Antonio considera que hace falta un lugar de encuentro y reunión de mayores, jóvenes y niños bajo los árboles, y plantea así el sentir común: “El barrio tiene una urgente necesidad de crear zonas verdes que den solución a los problemas de esparcimiento de nuestra gente.”

 

Para terminar, y resumiendo, señor Alcalde de Sevilla, vecinos y vecinas, sabemos que el PGOU no llama parque a nuestro Pulmón Verde, que es ahora mismo tan solo un solar de menos de 5000 metros cuadrados, pero recoge la opción como zona ajardinada:

 

Esto, para nosotros, nuestro mayores y nuestros niños es UN PARQUE, UN PULMÓN VERDE necesario para nuestro bienestar y para la sostenibilidad del centro de la ciudad, que soporta la actividad turística, la actividad comercial y el ocio nocturno, necesitando además y sin lugar a dudas, vecinos y vecinas que lo mantengan vivo, que mantengan el latido del corazón de Sevilla y este pulmón verde les brinde el necesario aire limpio, la imprescindible sombra veraniega, el inexcusable lugar cercano de juegos y encuentro, allí donde podamos rescatar los mejores de nuestros recuerdos y de nuestros hijos.

 

Autor: Antonio López 

vecino y miembro del colectivo Pulmón Verde